El 11 de febrero de 1934, Central Córdoba logró ganar su única copa nacional luego de empatar 2 a 2 ante Racing Club en la final del Trofeo "Adrián Beccar Varela". La Asociación Argentina de Fútbol consagró a nuestra Institución luego de la suspensión del partido cuando disponía un penal a favor, siendo el primer club del interior del país en obtener un título nacional en la era profesional.
Andrés Garramendi, el futbolista con más títulos en el club, se quedó con las ganas de patear su penal en el atardecer del 11 de febrero de 1934 en el viejo estadio de River Plate en Recoleta. Es que el árbitro uruguayo Manuel Sobreira había sancionado la pena máxima a los 43 minutos del segundo tiempo luego de un foul del zaguero Arturo Scardella sobre nuestro puntero oriundo de Armstrong, Telmo Collins, y a partir de la sanción, los hombres de Racing impidieron al juez contar los pasos reglamentarios desde el punto penal, se sentaron sobre la pelota y hasta formaron una barrera sobre la línea de gol.
Finalmente, Sobreira, luego de esperar diez minutos, abandonó el campo de juego y tiempo más tarde lo hizo el plantel albiceleste cubiertos de rechiflas y silbidos por tal actitud. Fue entonces que los hombres charrúas iniciaron la tradicional vuelta olímpica ante el delirio de la hinchada y el público neutral que hizo fuerza por nuestros colores. ¡Eramos campeones!
El trofeo se jugó en apenas dos ediciones y debió su nombre al exPresidente de la Asociación del Fútbol Argentino entre 1927 y 1929, año de su fallecimiento. Como homenaje, las autoridades incluyeron la disputa de un torneo, que en 1932 lo jugaron sus clubes afiliados, ganándolo Racing. Al año siguiente y para la ronda final, se incluyó a dos clubes rosarinos, a los campeones de Córdoba y Santa Fe, extendiendo la invitación hacia la Asociación Uruguaya de Fútbol.
Central Córdoba ganó la zona local que se jugó a finales de 1933 y junto a Nacional -hoy Argentino- representaron a la ciudad a partir de los playoffs que se iniciaron en el verano de 1934. En octavos de final, superamos a Platense 2 a 0 con sendos goles de Collins en el estadio riverplatense. Luego, en cuartos, eliminamos a Atlanta repitiendo el resultado, aunque el score estuvo a cargo de Tomás Costantino y Antonio Morales en la casa de Newell's Old Boys.
Las semifinales depararon clásicos. Por un lado, el de Avellaneda que enfrentó a Independiente contra Racing y por otro, el duelo provincial entre Central Córdoba y Gimnasia y Esgrima de la Ciudadela que se jugó en el estadio de Atlanta, en Villa Crespo y finalizó con un apretado 3 a 2 gracias a los tres goles que marcó "Cherrito" Morales.
La final quedó pautada para el domingo 11 de febrero en el estadio de River Plate. La Comisión Directiva decidió fletar un tren que se completó y salió desde la estación Central Córdoba a primera hora de aquel día para llegar a Retiro y desde ahí, llegar en caravana y a pie a la avenida Alvear esquina Tagle. Hubo cuatro mil charrúas que recibieron el respaldo de los locales y los tablones de Recoleta vibraron en un total de 35 mil personas.
Racing arrancó mejor ya que abrió el marcador a los tres minutos por intermedio de Demetrio Conidares. A los 28', el defensor Pedro Pompey derribó dentro del área a Costantino y Sobreira pitó penal. Collins pateó fuerte, pero Bottaso adivinó su intención y, más cortina metálica que nunca, detuvo aquel remate.
El empate llegó a los 37 minutos mediante un tiro esquinado de Costantino. En el complemento, nuevamente la Academia se adelantó cuando sobre los nueve minutos, Vicente Zito venció a Tito Funes. Sin embargo, la alegría duró poco y el esfuerzo charrúa dio sus frutos siete minutos después nuevamente por intermedio de "Mazzola" Costantino.
La igualdad mejoró nuestro andar y, cuando el gol de la victoria estaba cerca, llegó la sanción de otro penal y la posterior suspensión. El regreso de los hinchas a Rosario fue memorable y se sucedieron los festejos en la barriada. El club gratificó al plantel con 50 pesos por partido jugado y mandó a confeccionar las medallas correspondientes para cuerpo técnico y futbolistas. Recién el 20 de febrero, salió el fallo de la Asociación Argentina de Fútbol noticiando el título oficial para nuestra Institución. En abril de 1935, se aceptó la escultura denominada La Fatiga realizada por el italiano Eduardo Camillli y valuado en cien pesos.
La Institución luce con orgullo dicho trofeo en la sede social siendo la primera en el interior del país que ganó un torneo nacional en el profesionalismo del fútbol argentino.
Síntesis: Racing Club 2 - Central Córdoba 2
Racing Club: Bottaso; Rodríguez, Scarcella; Pompey, Serramía, De Mare (C); Conidares, Zito, Fassora, Leoncio y Bugueyro.
Central Córdoba: Funes; Garramendi, Bussano; D'Uva, Gaitán, Solero; Collins, Costantino, Sosa (C), Morales y Fernández.
Goles: 3' Conidares, 37' y 61' Costantino y 54' Zito.
Árbitro: Manuel Sobreira.
Detalle: 28' Bottaso le atajó un penal a Collins. 88' el partido fue suspendido por decisión arbitral.
Cancha: River Plate -neutral-.
Recaudación: $ 22.280.-
Plantel
Ernesto Funes; Andrés Garramendi, José Bussano; Lorenzo D'Uva, Germán Gaitán, Ricardo Solero; Telmo Collins, Tomás Costantino, Gabino Sosa, Antonio Morales, Guillermo Fernández, Ignacio Olmedo, Ramón Acosta y Félix Bussolini.
Cuerpo técnico
Héctor Di Giovanni y Rolando Di Santo.